Y veamos más de cerca cómo ya se le ha metido el pantaloncito justo entrelos sabrosos labios de ese pubis, abriendo camino a la lengua y al dedito, presagio de otras cosas... posiblemente cuando andaba le rozaba un poco, pero creo que no le molestaba sino que seguramente le daba un poco de gustito bien rico.
¿No estará un poco apretado ese pantaloncito?
Pero no todo dura eternamente, y por hoy termina la sesión y la hembrita se marcha al hotel a darle un poco de cercanía y de intimidad a su fotógrafo y admirador, y posiblememente los pies de La Gata tendrán un cierto gusto salado del agua de mar y de la arena.
Pues ha sido un placer recordar esa increíble mañana de playa.
1 comentario:
MUY PERO MUY BUENOS ESTAS FOTOS PANA QUE BIEN SE LE VE ESE JEAN CORTO. TE FELICITO.
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